[ mochilera ]

I

uff, con las justas llegué a laboratorio de química (más vale tarde que nunca). Sé que no se empieza ningún escrito serio con interjecciones pero... quién dice que esto es serio?

Terminó la aburrida y somnolienta clase (la gente que llega temprano, madruga. Yo no) y partimos con rumbo norte... o sur? Bah! del agucho a grau para asaltar un multired e irnos a chosica.

Nos estacionamos en la facu de medi' de San Marcos (uuy, la competencia) y luego de comer huevos de codorniz (6 x 1sol, 3 x 0.50) y piña en rodajas (a xina nomás) caminamos por todo grau, buscando cajero con DINERO DISPONIBLE. Qué tan complicado es encontrar uno un sábado por la mañana? Aparentemente, mucho. Jamás conseguimos, partimos con lo que teníamos.

Dormí todo el camino de ida, así que mucho no puedo contar; Nos dejaron botados en el último paradero para ahí tomar moto-taxi (a pesar de ser 5, a pesar de las mochilas y a pesar del conductor) 10 soles.. a cocachacra queríamos ir, en un par de clubes terminamos. Preguntando que como se prepara la pachamanca, que qué nos dan y a cuánto... Todo antropológicamente grabado.

Comimos pachamanca. Sí, la mejor parte fue descansar mientras almorzábamos (claro, sólo a esos chicos se les pudo ocurrir recorrer todo grau antes de viajar). El postre cortesía de los que compraron helados (no sé onde más entraba comida) y partimos con rumbo sur... a la lema... CAMINANDO porque, claro, tarde no pasan muchos micros. Y entre olvidos y sonidos, caminamos hasta el pueblo en sí. Con ganas de hacer problemas tomamos el 1er bus que encontramos. No nos quiso cobrar universitario y le hicimos lío hasta que nos dejó a buen recaudo en un paradero conocido y.. gratis (por sonso).

II

Prometí no bañarme.

Iríamos a un evento social y quedamos en ir hechos mugre con tierra en el cabello. Pero fui a recoger el regalo en mi casa, no pude evitarlo. Me bañé. Los chicos que esperaban en plaza san miky, obvio, se molestaron. Estuvieron resentidos hasta que tocamos la puerta de Megan y se les pasó de tanto que rogué.

La noche transcurrió entre risas y amarguras personales. Una disputa con un querido amigo, que no logro quitarme de la mente, malogró mi tan feliz weekend. No sé qué pasó. Sé que no me mira a los ojos cuando me habla y me molesta y duele pensar en ello.

Sigo con sueño, sigo cansada, sigo pensando (ok, ok, mi piojo piensa por mí) y sigo aquí. tuc tuc tuc. . . escribiendo.