Be or not to be...

Me proclamo una persona open minded, no me interesa la opción sexual de las personas cercanas a mí, pienso que no las define. Los defiendo, las defiendo. No importa si se trata de mi mejor amiga o de un viejo amor, los entiendo, los apoyo y todo continua siendo igual después de la gran confesión.

No soy gay. Lo siento, chicas, no me interesan mucho de esa manera.

Días atrás veía south of nowhere, una serie de Mtv que presenta a dos nenas y sus problemas en la sociedad, en la escuela y en sus casas.. por ser pareja. Salir al mundo y decir: hey, soy homosexual, no es cosa fácil. Veo cómo quienes me rodean padecen, se sienten mal, se odian por ser diferentes. Intentan seguir la corriente, ser heterosexuales y ahorrarse problemas, pero uno no puede, así nomás, cambiar quien es.

Yo sólo puedo estar. Estar, simplemente estar para escuchar y decir 'ya pasará'. Esconderlos de sus familias porque no se atreven a confesarlo, y yo no puedo hacer que lo hagan. Es complicado. Antes no veía lo complicado que resultaba, pero hace unas semanas mi hermano insinuó que soy lesbiana. Uy, no, no me ofendí pero sí me defendí... Cosa rarísima. Le dije que no lo era, a pesar de las bromas que las chicas y yo hacemos.. todas con novio (claro, pantalla..), pero novio presente en las bromas!

Empecé a pensar, para variar, qué pasaría si yo fuera homosexual. No tendría problema con el mundo, supongo, me seguiría comportando igual. Pero qué hay de mi familia? Vengo maquinando que mi madre es homofóbica. Pequeño gran problema. No sé si estando yo en ése lugar tendría la misma libertad de hablar del tema...


...that's the question.